El comité de competición dio ayer la razón al Levante en el conocido ‘caso Chumi’ por alineación indebida del joven futbolista del filial culé en el partido de ida de la Copa del Rey que enfrenó a ambos conjuntos. Sin embargo, eso es lo único que parece que va a sacar el conjunto granota en todo esto, una especie de ‘victoria moral’.
El joven defensa había sido expulsado con el segundo equipo del FC Barcelona por lo que no podía jugar aquel encuentro en el que Ernesto Valverde le dio la titularidad para retirarlo en el descanso debido a que el Levante estaba encontrando facilidades para hacer daño a su rival. De hecho, el equipo de Paco López logró una victoria por 2-1 que supo a poco.
En aquel momento nadie se percató de este detalle que saltó a los medios de comunicación el mismo día en que debía disputarse el partido de vuelta. En aquel momento ya habían transcurrido más de 10 días que son los que disponía el Levante para hacer cualquier tipo de reclamación sobre la alineación indebida. Ahora, como decimos, Competición ha dado la razón al club de Orriols pero ya no hay forma de compensar este daño… ¿o sí?
Para empezar Quico Catalán ya ha anunciado que seguirá recurriendo el caso para tratar de recibir, cuanto menos, una compensación económica. Sin embargo, los malpensados ya vislumbran una solución más retorcida teniendo en cuenta que hay un partido entre el Barça y el Levante en el Camp Nou a la vuelta de la esquina en el que lo normal es que los locales tengan el título de Liga en el bolsillo incluso de forma matemática.
El Levante, por su parte, se está jugando la vida ya que está inmerso en la lucha por el descenso. Este hecho no pasó desapercibido en el programa Estudio Estadio en el que el periodista Roberto Gómez hizo hincapié: “Esto se arregla fácil, hay un Barça-Levante dentro de nada con unos jugándose la vida y otros que no se jugarán nada”.